*Siéntate en una postura cómoda, que puedas aguantar un buen rato sin moverte y tener incomodidades. Siente cómo tu cuerpo absorbe la energía de la tierra y ésta sube por tu columna alargándola hasta llegar a tu coronilla. Imagina cómo ésta energía cálida recorre tu cuerpo limpiando y regenerando cada una de tus células. La luz que recorre tu cuerpo es roja y cálida, viene del centro de la tierra. La madre tierra se conecta con tu espíritu de de madre, hermanándose contigo, honrando tu semilla, tu transformación. La energía de la tierra que todo recicla, que es capaz de convertir la basura en vida, penetra en tu cuerpo limpiando el cansancio, enojo, malestar, la tristeza (cualquier energía de baja vibración). Sube desde tu base expandiendo tu luz interna, A tu titmo exhala fuerte sacando todo lo que no necesitas cargar, dándole espacio a tu luz interna que se expande desde tu corazón a todo tu ser. Esta luz te hace sentir fuerte y poderosa como la mismísima tierra, l